Tras las recientes elecciones presidenciales y congresuales, la política dominicana se presenta con dos escenarios contrastantes: por un lado, el oficialismo celebra una mayoría aplastante en el Congreso Nacional; por otro, la oposición se encuentra atrapada en una minoría legislativa que dificultará su labor parlamentaria.
El Partido Revolucionario Moderno (PRM) ha emergido con una imponente presencia en el Senado, asegurando 29 escaños, mientras que la oposición solo contará con tres senadores de la Fuerza del Pueblo. En la Cámara de Diputados, el panorama es igualmente desafiante para la oposición: el PRM proyecta ocupar alrededor de 144 de las 190 curules, según reveló Alfredo Pacheco, presidente de la Cámara de Diputados. Los escaños restantes se distribuirán entre el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) y la Fuerza del Pueblo.
Un Congreso Dominado por el PRM
Esta recomposición del Congreso Nacional otorga al PRM una amplia mayoría en ambas cámaras, permitiéndole avanzar con facilidad en la aprobación de proyectos legislativos. Durante el actual periodo, iniciado en 2020, el PRM ya ostentaba una mayoría con 19 senadores y 101 diputados en la Cámara Baja. Ahora, con su renovada fuerza, el PRM podrá aprobar leyes ordinarias sin dificultad, gracias a la mayoría absoluta que la Constitución requiere para tales decisiones.
Estrategia Legislativa y Consenso
Alfredo Pacheco, reelegido como presidente de la Cámara de Diputados, subrayó la importancia de utilizar esta mayoría de manera racional para avanzar en proyectos retrasados y aprobar nuevas leyes que el Gobierno tiene en agenda. “Usaremos nuestra mayoría para producir reformas y aprobar leyes importantes que antes se veían obstaculizadas por la falta de consenso”, afirmó Pacheco.
A pesar de su sólida mayoría, el oficialismo ha enfatizado que no buscará imponer su agenda de manera unilateral. Tanto el presidente Luis Abinader como Pacheco han reiterado su compromiso con el consenso y el diálogo. “No importa la gran mayoría que tengamos en el Congreso Nacional, queremos consensuar y así lo vamos a hacer”, declaró Abinader en una entrevista con LA Semanal con la Prensa. Esta postura busca garantizar que todas las decisiones legislativas se tomen con el más amplio consenso posible, tomando en cuenta las observaciones de todas las fuerzas políticas y sociales.
Desafíos para la Oposición
Con esta nueva configuración, la oposición se enfrentará a un camino espinoso, ya que su capacidad para frenar proyectos del Gobierno se verá significativamente limitada. Sin embargo, este nuevo equilibrio de poder también plantea la oportunidad para un debate más estructurado y enfocado en la construcción de un marco legislativo sólido que beneficie al país.
El predominio del PRM en el Congreso Nacional promete una era de reformas y avances legislativos, siempre bajo la premisa del consenso y la inclusión de diversas voces en el proceso democrático.
