Con un éxito rotundo, fruto de una impecable organización y la civilidad demostrada por los ciudadanos en todo el territorio nacional, se celebró el proceso electoral el pasado 19 de mayo. Sin incidentes de importancia, el pueblo dominicano ratificó su compromiso con la democracia, convirtiéndose en un ejemplo para toda Latinoamérica.
Los candidatos que gozaron de mayor aceptación del electorado resultaron victoriosos, encabezados por el presidente de la República. Destacó también la senadora Ginette Bournigal, quien se convirtió en la única puertoplateña en ser electa en tres ocasiones en la historia. Asimismo, los hermanos Medina y el diputado Emil Durán lograron sus escaños, mientras que la reformista Fiordaliza Estévez hizo su regreso al Congreso Nacional. La elección de Heidi Musa como diputada reivindicó a la familia Musa en el ámbito político, a pesar de que su tío Walter perdió la candidatura senatorial, tal como lo había vaticinado el periódico El Faro.
Con los resultados claros, el camino queda libre para que aquellos que no triunfaron comiencen de nuevo si así lo desean. Estos deberán demostrar su valía fuera de las posiciones oficiales para ganarse nuevamente el respaldo del pueblo. Los partidos que perdieron el reconocimiento de la Junta Central Electoral por no alcanzar la cantidad de votos requeridos por la ley también tienen la oportunidad de reflexionar y decidir su futuro con dignidad.
El país es de todos, no solo de los ganadores. La unidad y el compromiso son esenciales para avanzar. Se espera que los partidos políticos eduquen a sus miembros, evitando luchas internas por el liderazgo y enfocándose en trabajar por el desarrollo del país. Como ha señalado el expresidente Leonel Fernández, es crucial demandar más atención en áreas como salud, educación, empleo, turismo y agricultura, beneficiando tanto a empleados como a trabajadores del campo y la ciudad.
El presidente ha destacado por su humildad, un valor que debe prevalecer entre todos los electos y sus acompañantes en los ministerios y posiciones descentralizadas. Es fundamental exigir con altura y no obstruir el desarrollo de la educación ni hacer críticas infundadas. La campaña ha terminado y ahora es el momento de estar unidos para hacer crecer la economía y mejorar la vida de todos los dominicanos.
