Un terremoto de magnitud 6,6 golpeó Puerto Rico antes del amanecer del martes, menos de un día después de que otro sismo remeciera el territorio estadounidense y causara graves daños en algunas zonas.
El Servicio Geológico de Estados Unidos situó el epicentro justo al sur de la isla a una profundidad de 10 kilómetros. No se emitió una alerta de tsunami.
En un primer momento no había noticias sobre daños o víctimas.
El temblor de magnitud 5,8 del lunes por la mañana derribó cinco viviendas en Guanica, una localidad costera en el suroeste de la isla, y causó graves daños en docenas de casas. También causó pequeños aludes de tierra y apagones.