La indiferencia o contubernio de empresarios de Santo Domingo e inversionistas mexicanos han logrado preocupar a los puertoplateños que durante años han anhelado la construcción de un moderno muelle de cargas y descargas garantizando así que más de siete mil padres de familia recibían dinero para el sostenimiento de sus hogares.
La revelación obtenida por medios de comunicación en torno a la lentitud de manera del problema que se ha realizado en Santo Domingo en medio de convocatorias y suspensiones y puntos tratados fríamente relacionado con la construcción del muerto mueve a suspicacia, creando intranquilidad en los inversionistas puertoplateños santiaguenos y mocanos que fueron los primeros en hacer la propuesta a las autoridades del gobierno presidió Danilo Medina hasta el 2020.
Recientemente fue suspendida otra convocatoria y llama poderosamente la atención de que los funcionarios del gobierno, cuyo presidente Luis Abinader, se comprometió para darle continuación al proyecto que inició el pasado gobierno con la aprobación de Autoridad Portuaria Dominicana y todos los organismos que forman parte del Consejo de la institución.
Se ha dicho reiteradamente sin que haya asumido la responsabilidad oficialmente el organismo, que los inversionistas mexicanos han propuesto una ampliación de Taino Bay y que para ello habría limitar el lugar donde se construirá de acuerdo a los planos originales, el puerto de exportación e importación donde mayor cantidad de nativos laborará, desde obreros, hasta camioneros de distintos niveles, beneficiando diversas empresas de la 14 provincia del norte.
No se explica la razón por la que los escogidos ingenieros para la construcción, Miguel Angel Jiménez Messón y Rafael Silverio Galán, Kuki, hayan mantenido silencio ante todo lo que está sucediendo, ya que ellos conocen que tiene adversarios en la capital, incluyendo miembros del consejo Ejecutivo de Autoridad Portuaria que implícitamente se han identificado con los ejecutivo de Taino Bay y estarían dispuestos a favorecerlos.
Otra versión de cuenta que miembros del Consejo de Autoridad Portuaria tienen intereses relaciones con las cargas que vendría desde el extranjero por el puerto de Puerto Plata y que afectaría sus negocios que actualmente lo están haciendo por Santo Domingo.
Se espera que el presidente Luis Abinader arrienda a Juan Luis Rodriguez, director y al presidente del Consejo, de manera que Puerto Plata no resulte perjudicada, ya que no solamente de turismo requiere la zona, sino también el movimiento portuario para dinamizar la economía.