El Instituto Nacional de Atención a la Primera Infancia (Inaipi), donde ayer el Poder Ejecutivo destituyó a sus principales funcionarios, directores y su directora general renunció, ejecutó un presupuesto de gastos y aplicaciones financieras de 4 mil 907 millones 055,459.00 en el año 2019.
Dentro de ese presupuesto, la adquisición de materiales y suministros representaban 623 millones, renglón donde el mayor gasto lo representa la compra de alimentos y productos agroforestales.
Para el 2020, el presupuesto de esa institución fue elevado a 5 mil 960 millones 525,858.00, y asimismo se pretendía elevar el monto para la compra de materiales y suministros a 1,310 millones, donde se gastarían 788 millones en alimentos y productos agroforestales.
Siendo el Inaipi la institución responsable de gestionar la prestación de servicios de atención integral de calidad a niños y niñas durante la Primera Infancia, es decir de 0 a 5 años de edad, y a sus familias, uno de los renglones de compra donde mayores recursos se destinan es justamente a la compra de alimentos, con los cuales proveen servicios a entidades públicas y privadas vinculadas al manejo de niños de 0 a cinco años de edad.
En el año 2018 a Inaipi se le asignó un presupuesto total de 4 mil millones 155 mil pesos, donde los materiales y suministros absorbieron 639 millones y los alimentos y productos agroforestales 455 millones, de acuerdo a sus presupuestos y modificaciones oficiales.
El cescándalo de lo ocurrido en la entidad gubernamental se desató cuando Pablo Cabrera, presidente de la empresa La Z, distribuidora de alimentos y proveedora del Estado, así como los ejecutivos de otras empresas, denunciaron que participaron en una licitación de emergencia que realizó el Inaipi, y que la misma tuvo serias irregularidades. El empresario hizo su denuncia en el programa Esta Noche Mariasela.