En cinco ocasiones distribuidas en más de una docena de audiencias, los imputados del caso de corrupción Antipulpo han intentado recuperar su libertad sin éxito alguno. Lo mismo ha sucedido con los acusados del Caso Coral, quienes a pesar de varios intentos de revocar la medida, siguen guardando prisión preventiva.
Aunque el Código Procesal Penal dominicano presenta más de 20 mecanismos legales para recobrar su libertad antes de cumplir la condena, 15 imputados que cumplen prisión preventiva como medida de coerción en los casos mencionados han aprovechado la oportunidad de apelar la decisión o han esperado a la revisión obligatoria de las medidas, con la esperanza de retomar su libertad.
Caso Antipulpo
El 8 de diciembre del año pasado, el entonces juez de Atención Permanente del Distrito Nacional, José Alejandro Vargas, impuso medida de coerción a diez implicados en el presunto entramado de corrupción, que, según el Ministerio Público, dirigía Alexis Medina, hermano del exmandatario Danilo Medina.
A principios de diciembre, la defensa de los imputados Alexis Medina Sánchez y Francisco Pagán, exdirector general de la Oficina de Ingenieros Supervisores de Obras del Estado (OISOE), aseguró que sus clientes cuentan con arraigo suficiente para ser favorecidos con la libertad por el juzgado de Atención Permanente del Distrito Nacional.
Pese a esto, la medida de coerción fue conocida por el juez José Alejandro Vargas y, seis meses después, cada uno de los presuntos implicados en el Caso Antipulpo están cumpliendo prisión preventiva en sus casas o en el Centro de Corrección y Rehabilitación de Najayo Hombres, en San Cristóbal, desde el pasado 9 de diciembre, incluyendo en los privados de libertad a Medina Sánchez y Pagan.