Las universidades privadas que acogen la mayor matrícula de estudiantes de clase media y clase media baja están pasando por una difícil situación económica fruto de la crisis sanitaria y económica generada por la pandemia del coronavirus, ya que las principales de ellas registran deserciones en el orden del 35% y un 70% de los estudiantes ha dejado de inscribirse.
En conjunto, más de 90,000 estudiantes de esas universidades han debido dejar las aulas, por situaciones que tienen que ver directamente con la pérdida de ingresos y empleos de sus familias o de ellos mismo por la situación de pandemia que vive el país.
La revelación la ofreció a elCaribe el doctor Franklin García Fermín, ministro de Educación Superior, Ciencia y Tecnología, quien observó que la significativa deserción estudiantil afecta directamente a las casas de altos estudios en lo económico, generando incertidumbre financiera. Al respecto, recordó que más de un millón de dominicanos han perdido sus empleos y que esas universidades, las que rehusó identificar, son las más afectadas en ese sentido porque acogen a la mayoría de los estudiantes que asisten a academias privadas.
Sin embargo, el ministro García Fermín aseguró que la situación preocupa al presidente Luis Abinader, quien en su agenda inmediata tiene contemplado buscar una solución junto a los rectores de las universidades.
“El presidente Luis Abinader ha dicho que ningún estudiante universitario se puede quedar fuera por falta de pago, y en ese sentido se está buscando un acuerdo con las universidades para presentar una solución, que puede ser mediante un bono estudiantil”, apuntó.
Y en cuanto a las universidades, García Fermín esbozó soluciones dirigidas a preservarlas, destacando, por ejemplo, que las academias han solicitado que en términos impositivos se les trate como lo plantea la Ley y que se les facilite seguir acogiendo a los estudiantes que han desertado por cuestiones económicas, a la vez que se evita que otros hagan lo mismo.
“Hay que buscar un mecanismo que haga posible que una parte considerable de esos estudiantes puedan volver a matricularse.
Las universidades han pedido mejores tratos fiscales, o que se les faciliten tasas bajas para que los préstamos en que han tenido que incurrir no les salgan tan elevados, ya que muchas universidades ha mantenido a su personal laborando”, expresó Franklin García Fermín.