El sacrificado trabajo de los medios de comunicación en las provincias del país merece el respeto tanto del sector público como del privado. Aunque la mayoría de periodistas y comunicadores ha servido a empresarios, profesionales, sindicalistas y políticos, es necesario abordar los desafíos que enfrentan. Muchos medios y sus trabajadores se ven sometidos a presiones que podrían comprometer su integridad, una situación penosa y preocupante.
A pesar de las dificultades, la imparcialidad y pluralidad se mantienen en los medios de comunicación, aunque hay excepciones notables de individuos que han incursionado exitosamente en la política y buscan proyectar una imagen de seriedad. Aprovechan la falta de documentos y auditorías que permitirían a periodistas y medios hacer valoraciones con veracidad, evitando que los propios comunicadores comprometidos, incluyendo dirigentes sindicales, salgan en su defensa y se unan a los denunciados, abandonando a sus colegas.
En una ocasión, El Faro denunció que la mayoría de los medios estaban contratando profesionales de otras áreas en perjuicio de los periodistas. Pocos se solidarizaron, y la mayoría guardó silencio. Hoy día, la profecía de El Faro se ha cumplido: menos colaboradores de las organizaciones de la comunicación laboran en los medios, comprando espacios para los dueños. La publicidad y los anuncios, en lugar de beneficiar a las empresas, llegan a los productores de programas, quienes buscan recursos para pagar a los propietarios.
Sin embargo, la responsabilidad no recae únicamente en los productores, sino en aquellos que han permitido la liberación de espacios y han contribuido a la sustitución de sus colegas. Al iniciar el año 2024, se espera que haya una reflexión iluminada sobre estos dilemas, ya que, de lo contrario, las redes sociales continuarán siendo un método de información sesgado que alimenta a una población limitada. Las verdades sometidas a cuestionamientos podrían ser bienintencionadas, pero carecerán de la investigación y responsabilidad de los medios tradicionales dirigidos y redactados por periodistas y comunicadores con experiencia que conocen cómo realizar su labor de manera ética y efectiva.
