Haití se encamina mañana, miércoles 7 de febrero, hacia un estado de vacío institucional total, con un jefe de gobierno en el crepúsculo de sus funciones, un parlamento que no funciona desde 2020 y una airada población tirada a las calles buscando salida a su agobiante situación general.
El juego está trancado. Ayer, las protestas reventaron con fuerza en las principales ciudades. Choques entre manifestantes y la policía. Hay sólo un grito: ¡Fuera Henry!.
Un ambicioso acuerdo que este miércoles llega a 414 días de haber sido firmado ha sido quebrantado, agravando más la crisis del país y empujando a partidos y movimientos opositores a reclamar la salida inmediata del primer ministro Ariel Henry, llegando a poner todas las opciones sobre la mesa para lograr ese propósito.
cómo y por qué ocurre todo esto
Este 7 de febrero marca el final del mandato presidencial en Haití, según la constitución del país, siendo la transición una cuestión vital en el sistema de sucesión democrática.
El período presidencial dura cinco años y comienza el 7 de febrero siguiente a las elecciones presidenciales. El mandatario electo sólo puede ejercer un máximo de dos mandatos.
Así es como Jovenel Moise comenzó su mandato el 7 de febrero de 2017, cuya gestión culminaría mañana, 7 de febrero de 2024.

La madrugada del 7 de julio de 2021, Moise fue asesinado tras un ataque en su residencia por un grupo armado compuesto de haitianos y colombianos. Su esposa, Martine Moise, resultó herida tras el ataque.
Hilando la historia
Tras esto se produce la llegada de Henry al mando en Haití y, desde entonces, las presiones contra su gestión no han parado, lo que se explica en un hilo de esa historia.
El 5 de julio de 2021, Ariel Henry fue seleccionado como el próximo primer ministro de Haití por el presidente Jovenel Moïse, pero dos días después el mandatario fue asesinado.