Santo Domingo.-Aunque constitucionalmente el presidente Danilo Medina no puede ser candidato por el Partido de la Liberación Dominicana (PLD), salvo una modificación de la Carta Magna que lo habilite, un nuevo escenario comienza a gestarse, en el que se enfrentaría nuevamente al expresidente Leonel Fernández, ahora para definir quién será el líder de la oposición política en República Dominicana.
Con los partidos Reformista Social Cristiano (PRSC) y Revolucionario Dominicano (PRD) reducidos a su mínima expresión, el cuadrilátero opositor quedaría para los que muchos definen como los dos alumnos más aventajados del fenecido fundador del PLD, Juan Bosch.
El PLD, tras 16 años corridos gobernando el país, perdió las elecciones municipales del pasado 15 de marzo y las presidenciales y congresuales del pasado domingo 5 de julio, mientras la Fuerza Pueblo (FP), un partido con apenas seis meses de fundado, logró obtener 5.69 % de los sufragios, lo que la convierte en una organización mayoritaria.
Según algunos observadores, las declaraciones del presidente interino del PLD, Temístocles Montás, de que en lo adelante esa organización será la principal en la oposición, sería un metamensaje a Fernández, su antiguo compañero de partido.
Mientras el coordinador general de Fuerza del Pueblo, Radhamés Jiménez Peña, afirmó que su partido no sólo se convirtió en mayoritario en seis meses, sino que además será la segunda fuerza en el Senado con seis curules.
Los planteamientos de estos dirigentes políticos augurarían que dos de los alumnos más aventajados del fenecido líder ad vitam del PLD, Juan Bosch, entrarían al cuadrilatero en los próximos meses.
Incluso Jiménez Peña denunció, al ser entrevistado el pasado jueves en un programa de televisión, que había sectores presionando para que la FP no fuera reconocida como partido mayoritario.
Danilo no puede
Medina no puede ser candidato, a menos que se modifique la Constitución, una posibilidad remota en los próximos años. Esto sería un punto a favor de Fernández.
A medida que pasan los años la lucha Fernández-Medina va adquiriendo ribetes personales, según algunos y citan que el Gobierno habría traído al país a Quirino Ernesto Paulino Castillo, quien cumplió una condena de 10 años en Estados Unidos por narcotráfico, para dañar la imagen personal y política de Fernández.
El 27 de febrero del 2015, tan pronto llegó al país, Castillo Paulino inició una cruzada en los medios de comunicación exigiendo a Fernández el pago de una supuesta deuda de 20 millones de pesos.
Con su imagen debilitada, el exgobernante se habría visto obligado a llegar a un acuerdo para que Medina lograra un nuevo período, mediante una modificación constitucional que también estableció que este no podría aspirar jamás.