Washington (EFE).- El presidente de EE.UU., Joe Biden, amenazó este lunes con sanciones a Birmania tras el golpe de Estado y pidió a la comunidad internacional que hable con “una sola voz» para hacer que los militares birmanos “cedan inmediatamente” el poder.
En un comunicado distribuido por la Casa Blanca, Biden anunció que ha pedido a su Gobierno que revise “inmediatamente” si debe volver a imponer las sanciones, levantadas en la última década a medida que Birmania avanzaba hacia una incipiente y frágil transición democrática.
“Durante casi una década, el pueblo de Birmania ha estado trabajando constantemente para establecer elecciones, un gobierno civil y la transferencia pacífica del poder. Ese progreso debe ser respetado”, aseveró el mandatario estadounidense.
Si la democracia no se respeta, Biden aseguró que “tomará las acciones que sean adecuadas”, pero no especificó si está evaluando algo más allá de posibles sanciones, un asunto que tampoco clarificó la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, en su rueda de prensa diaria.