Como empresario, el hermano del expresidente Danilo Medina, Juan Alexis Medina, se alzó con millonarios contratos en varias instituciones del Estado. Una de esas fue en la Unidad de Electrificación Rural y Sub-urbana (UERS).
A solicitud de la Procuraduría Especializada de la Persecución a la Corrupción Administrativa (Pepca), la Cámara de Cuentas realizó una auditoría a esta institución por el período comprendido entre el 1 de agosto del año 2012 y el 31 de agosto del año 2020, donde además se le instruyó poner énfasis a los procesos de compras suscritos por las empresas vinculadas al principal imputado en el caso Antipulpo, Juan Alexis Medina.
La UERS facturó 395,430,007 pesos a seis empresas, vinculadas en la actualidad en el caso Antipulpo, las cuales durante su proceso de contratación evidenciaron debilidades, cita el informe. Estas empresas fueron: Omalto Suply, Suim Suplidores Institucionales Méndez, General Supply Corporation, United Suppliers Corporation, Contratas Solution Services CSS, Globus Electrical, vendían a la UERS materiales eléctricos y de papelería.
Además, el informe indica que el Comité de Compras y Contrataciones de la entidad no realizó los procedimientos de selección por Comparación de Precios, para adquirir bienes como lo establece la Ley 340-06 de Compras y Contrataciones, estos eran realizados de manera directa a través del sistema interno de la institución, Sistema de Aplicación de Procesos (SAP), mediante invitaciones enviadas por correo electrónico a los proveedores, para que remitieran sus cotizaciones, sin dar participación a otros posibles oferentes.
Cita el caso del pago de 30,572,924 pesos por concepto de propaganda a un solo proveedor, Editorial Arianna, SRL, sin haber agotado el procedimiento de selección acorde con la ley.
Destaca como otra irregularidad que la UERS desembolsaba dinero producto de las adjudicaciones a empresas, entre las que destaca las vinculadas a Medina, sin tener un contrato que sustentara la actividad comercial.
En su turno de réplica la exdirectora de la UERS, Thelma Eusebio, explicó a los auditores, que la entidad le daba aval de contrato a las órdenes de compra.
“En los expedientes de compras podemos verificar que todos tienen su pedido de compra el cual es válido como contrato ya que detalla, el tiempo de entrega, el tipo de entrega, la condición de pago y donde el suplidor tiene que entregar la mercancía”.
Esa explicación no tuvo validez para la Cámara de Cuentas que deploró que, por ausencia de un contrato, la entidad auditada no tiene un documento legal para exigirle a los proveedores el cumplimiento de los requisitos o aplicarle las cláusulas legales.
Otros de los aspectos, a destacar en la investigación fue la sobrevaloración de precios en la adquisición de bienes.
El informe refiere una suma ascendente a 1,490,932 pesos en sobrevaloración de los bienes adquiridos por la UERS de su proveedor General Supply Corporation, propiedad del imputado en el caso Antipulpo.
“En la comparación realizada con los precios contenidos en las facturas pagadas por las UERS a General Supply Corporation, en el año 2016 y los precios suministrados en la cotización del proveedor Tecnología Eléctrica, SRL (Telecsa), verificamos sobrevaloración en artículos (materiales eléctricos) adquiridos, por un valor de 1,490,932 pesos, no se pudo comprobar la calidad de estos”.
Ejemplo, según la comparación del equipo auditor, la UERS le compró a Medina un cable de viento 5/16” a 30 pesos cuando en el mercado cuesta nueve pesos, es decir, hasta tres veces su valor.